Cirerets es un coupage de dos de las grandes variedades autóctonas del Priorat: garnacha y cariñena.
Las uvas proceden de cepas de 50 años situadas a una altitud de entre
450 y 650 metros, plantadas sobre suelos de licorella, los suelos
pizarrosos típicos del Priorat. Para su elaboración, una vez finalizado
el proceso fermentativo, se realiza una crianza de 18 meses en barricas
francesas de Allier.
El sello Mas Alta queda bien impreso en Cirerets,
un vino que al poco tiempo de nacer ya ha conseguido el reconocimiento
internacional con las preciadas puntuaciones Parker. Sin duda, un Priorat que no puedes dejar escapar.